Un operario de la madera crea un curioso bosque animado en Magazos, Viveiro

Lucía Rey
lucía rey VIVEIRO / LA VOZ

VIVEIRO

Florin Sas, a la izquierda, en la finca donde coloca las esculturas de madera
Florin Sas, a la izquierda, en la finca donde coloca las esculturas de madera Xaime Ramallal

Florin Sas, natural de Rumanía, emplea motosierras para tallar las figuras

12 may 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Setas de distintos tamaños, algún corzo, un oso con un pez en la boca, un pequeño puente sobre un regato, una curuxa e incluso una motosierra dan forma al curioso bosque animado de madera que desde hace alrededor de un año hay en la finca que hay en frente de la fuente de Santa Ana, en Magazos (Viveiro). Fue entonces cuando la parcela de monte comenzó a llenarse de vida con diferentes esculturas. Una circunstancia que despierta la admiración y el interés de muchas personas que acuden a recoger agua a este manantial público, uno de los más apreciados del municipio. El autor de las obras es Florin Sas, vecino de Fondón, emplazado también en Magazos, y que trabaja en el sector forestal, cortando madera. El operario es natural de Rumanía, pero lleva asentado en Viveiro casi dos décadas. «Cheguei aquí o 4 de xuño do 2005 cun contrato para traballar con Maderas Patricio, e aínda sigo con eles», explica sonriendo en un perfecto gallego Florin.

En la imagen, Florin, que nació en Rumanía hace 46 años y se asentó en Viveiro hace casi 20, con el oso que ha realizado con motosierras. Este particular bosque animado puede visitarse en Magazos
En la imagen, Florin, que nació en Rumanía hace 46 años y se asentó en Viveiro hace casi 20, con el oso que ha realizado con motosierras. Este particular bosque animado puede visitarse en Magazos Xaime Ramallal

Comenta que la primera escultura que realizó y que llamó la atención fue un jabalí. Lo colocó en un parque de Grañas do Sor, municipio de Mañón, pero la obra fue robada. Tiempo después logró recuperarla en A Coruña, pero eso lo animó a reunir algunas cerca de casa. «O problema que tiña na casa é que non se ven, e que acaban ocupando tanto espazo que chegan a estorbar», indica. Para solucionar las dos cuestiones habló con el propietario de la parcela que hay junto a la fuente. No le puso problema.

«Gústame dar forma a cepos ou troncos que atopo para que a xente os vexa e os disfrute. Non son para roubar», Florin Sas, operario de la madera que esculpe figuras con motosierras

Grandes y pequeños se sorprenden con las tallas de madera
Grandes y pequeños se sorprenden con las tallas de madera Xaime Ramallal

Según detalla Sas, cuando trabaja en el monte a veces encuentra troncos o partes de árboles que se pueden aprovechar, y en sus escasos ratos libres las va tallando. «Traballo coa motoserra oito ou nove horas ó día, polo que moitas veces non teño tempo de facer máis, porque teño encargos e xa fixen, por exemplo, unha aguia para as casas hobbit que hai en Galdo», cuenta. Para realizar las esculturas emplea, principalmente, motosierras de distintos tamaños. «Teño unha motoserra grande do traballo e logo varias especiais máis pequenas. Espadas especiais de cirurxía, que teñen a punta fina e permiten realizar traballos de máis precisión. E nalgunha figura utilizo tamén a radial», expone. La figura que representa a una motosierra la talló en Muras, mientras que el oso con el pescado en la boca llegó del río Sor, en la zona de O Sixto.